LA CRISIS, EL SUEÑO Y EL INCONSCIENTE

Freud me lo hubiera explicado mejor, pero yo lo he interpretado a la primera. Resulta que sueño que viene mi madre, una tía mía, ambas ya fallecidas, con mi hermana y mi cuñado a casa, con 5 o 6 cerdos y unos cuencos tremendos y se ponen a cocinar lentejas y alubias con tocino y me dicen que son para luego meterlas en frascos de cristal para tener para todo el año comida. Mi hermana, es cierto que me deja, cuando viene el fin de semana un cazo de alubias y garbanzos con sopa y puré que sabe que me gusta, para que no coma todos los días en el bar y no tire tanto de bote si me quedo en casa, pero de eso a lo que querían hacer en el sueño………………… va un abismo. Freud lo hubiera interpretado como una fijación en la madre, en una etapa infantil, de esos recuerdos que están en el inconsciente y que aparecen en los sueños, que echo de menos el pecho de mi madre, en una regresión al vientre materno, ect., pero yo lo veo más en el consciente colectivo y de tanto hablar de crisis que es cierta y de que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades casi todos, yo el primero, pues ahora veo que tengo que comer más días en casa que si no se te va un dineral. Luego ocurre que antes de comer voy al Restaurante de Rafa, a tomarme un vino y me dice “como te vas a ir a comer solico a casa” y le digo que sí que me voy, dos o tres veces y a la cuarta me veo el plato puesto en la mesa donde come él con la Lourdes y Mari Carmen la cocinera y los cuatro como en familia y como no soy de mucho comer, mis amigos lo saben, encuentro más placer en con quién voy a comer que lo que voy a comer. Por cierto hoy había hecho un cuenco de guiso de espárragos con huevos escalfados caldoso, receta de su abuela “cojonudos” que hubiera dicho el Rey, y entre el Rafa, sobre todo y yo algo, junto con Mari Carmen, pues la Lourdes ha comido garbanzos, hemos dado buena cuenta del guiso con casi una barra de pan sobado y la bota de vino al lado.