Aprovechando la oportunidad de la plantación de diez mil chopos en los sotos comunales de este municipio, va a tener lugar el domingo próximo 15 del actual a las diez de la su mañana la cultural "Fiesta del Árbol”.
Las Juntas directivas de las sociedades locales y todo el vecindario de esta floreciente villa han respondido con verdadero entusiasmo al llamamiento de nuestro celoso y activo alcalde don Manuel María de León, pudiendo asegurarse un grandioso éxito, cual corresponde a una fiesta que hace a los niños hombres y a los hombres ciudadanos y a los pueblos grandes.
Milagro 20 de enero de 1.922 (EL PENSAMIENTO NAVARRO)
El acto patriótico y eminentemente educativo, ha sido el celebrado el domingo último (15 de enero) con motivo de la “Fiesta del Árbol”.
Atentamente invitadas por nuestro alcalde, se reunieron en la plaza pública, después de la misa parroquial, las autoridades y Juntas y directivas de la sociedades y fuerzas vivas de la población y en presencia de todos los niños y niñas de las escuelas nacionales y colegio de Religiosas Hijas de la Cruz, presididos por sus respectivos profesores, se procedió por nuestro digno párroco d. Jesús Etayo a la bendición de las plantas que inmediatamente se iban a colocar. Terminada la bendición y repartido entre los niños los nuevos árboles, se organizó una procesión cívica, que a los acordes de la banda de música y entre el volteo de campanas y estampido incesante de cohetes, recorrió la población deteniéndose en los lugares destinados a la plantación, donde los niños ayudados por algunos obreros, colocaron las primeras plantas, que desde aquel momento quedaban encomendadas a su custodia.
En el trayecto se canto por los niños, acompañados de la banda un hermoso himno, propio de estos actos; era de ver el entusiasmo y alegría que reflejaban los pequeños en sus rostros cuando repetían: “Que esta es una fiesta de paz y de amor”.
Terminado el itinerario en la plaza pública, subieron las autoridades y comisiones a la Casa Consistorial, desde cuyo balcón dirigió la palabra al numeroso público el celoso maestro D. Joaquín Corti, explicando en párrafos sencillos al par que elocuentes, cómo nació la fiesta del árbol y en qué consiste dicha fiesta; aduciendo por último testimonios de hombres eminentes de todos los tiempos para inculcar en los oyentes el amor al árbol.
Una salva de aplausos coronó las últimas palabras de los tres oradores.
Como final se repartió a cada uno de los niños y niñas un panecillo con chorizo y guirlaches y las autoridades y comisiones fueron obsequiadas con pastas y licores en las salas consistoriales
El corresponsal.