Ayer fue el día de la madre. Es el primer domingo de mayo, para mí una fecha que reconozco no la anticipo, no sé quien la puso, acaso el corte inglés, ni el porqué de ese día. A los que nos falta nuestra madre, mi amigo Joaquín se despidió de la suya el sábado, al no tener que pensar en regalar nada, ese día me coge de sorpresa. Pero a su vez, cuando llega y me entero, y más hoy al leer el relato que mi amiga Men ha escrito sobre su madre, en su blog que se llama DEVANEOS, me ha hecho pensar en la mía y siento esa soledad materna, ese desgarro que no se puede suplantar con nada, acaso, en parte, en mi caso, con mi hermana y entonces pienso que para muchos, el día de la madre tendría que ser el día de la hermana e incluso el día de la esposa, esa que a la vez que madre de tus hijos te hace las alubias o las croquetas, casi como tu madre te las hacía. Felicidades, pues a todas la madres, hermanas y esposas.
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